Las películas de mi vida (XXI): Arsénico por Compasión

Creo que nunca antes había comentado ninguna película de Frank Capra. También es verdad que no he visto muchas de él, unas cuatro o cinco como mucho, que yo recuerde. Esta es una gran comedia de Frank Capra. El guión es absolutamente maravilloso y el argumento es tan absurdo, las situaciones que en él se dan son tan disparatadas que si al ver esta película no esbozas (al menos) una sonrisa, es que poco te hará reír en esta vida.
 
El argumento es sencillo. Mortimer Brewster (Cary Grant) es un crítico teatral, solterón empedernido y orgulloso, que cae en las garras de una belleza rubia hija de un pastor baptista. Como el pastor vive al lado de sus tías Abby y Martha, deciden pasar por su casa para despedirse antes de irse de viaje de novios. Allí, casualmente, Mortimer descubre que sus tías son unas peligrosas asesinas en serie (tras descubrir un cadáver escondido en un arcón) que creen estar haciendo obras de caridad cada vez que matan (envenenándolo) a cada pobre viejecito solitario que llega a su casa para pedir alquiler de habitación. Cuando Mortimer se da cuenta de esto, sus tías ya llevan asesinados doce caballeros (sus "gentlemen", como ellas los llaman). Lo mejor de todo es que ellas no son conscientes de estar cometiendo ningún delito, sino que ellas lo hacen por caridad, por misericordia, para que esos pobres ancianitos solitarios encuentren paz y sosiego.
 
Como Mortimer no quiere entregar a sus tías a la policía, decide cargarle el muerto (y nunca mejor dicho) a su hermano Teddy (que está loco y cree que es Theodore Roosevelt), que, inocentemente, cava fosas en el sótano de la casa (creyendo que son esclusas del canal de Panamá) donde entierran (con ceremonia cristiana, por supuesto) a los viejecitos.
 
La cosa se complica porque mientras Mortimer va a por la firma del juez para internar a su hermano Teddy en un sanatorio, aparece el otro hermano Brewster, Jonathan. Y éste sí que es un peligroso criminal y asesino en serie que se acaba de fugar de la cárcel y busca refugio en casa de sus tías. Viene acompañado del siempre espléndido secundario Peter Lorre, que hace de cirujano plástico y se hace llamar Dr. Einstein (aunque no es médico ni nada). Lo único es que de vez en cuando le cambia el careto a Jonathan Brewster para que la policía no le reconozca. La última cara que le ha hecho (según él mismo dice) la vio en una película de miedo. Y no es otra que la cara de Boris Karloff.
La cuestión es que Jonathan ha matado a un tal Sr. Spinalzo y quieren encontrar un sitio donde enterrarlo. Y aunque sus tías se oponen (porque no se trata de uno de sus caballeros), finalmente lo entierran en el sótano con los demás.
 
El final de la historia es de lo más disparatado. Acaba con la llegada de la policía a la casa porque Teddy ha tocado la trompeta y los vecinos se han quejado. Hay una serie de equívocos que llevan a Jonathan a pensar que la policía lo busca a él en lugar de a su hermano Teddy y se arma la de San Quintín porque uno de los policías le dice que se parece a Boris Karloff y no hay cosa que le enfurezca más que el que le digan eso. La película acaba con Teddy y las tías en el manicomio por pretender hacer creer a la policía que hay 13 cadáveres en el sótano (que los hay realmente), pero Mortimer maneja de tal modo la situación que hace creer a la policía que están locos. Jonathan detenido porque descubren que es él quien se ha escapado de la cárcel en Indiana. El Dr. Einstein (como casi todas las ratas) sale huyendo en cuanto puede. Mortimer Brewster descubre que él en realidad no pertenece a la familia, sino que es adoptado. Y su mujer, Elaine, baja al sótano y sube horrorizada diciendo que hay 13 cadáveres ahí abajo, pero Mortimer no le deja terminar la frase porque se la lleva de luna de miel sin dejar de besarla para que no pueda hablar.
 
La actuación de Cary Grant es claramente exagerada. Sobreactúa en los momentos de más asombro de la película. Pero por lo que he podido leer, fueron exigencias del propio Frank Capra. Esta película es básicamente una película de secundarios, en la que todos están magníficos: desde el que interpreta a Teddy hasta el que interpreta a Jonathan Brewster, pasando por las tías, los policías y Peter Lorre. Mención especial merece (por el cariño que le tengo desde hace muchos años) una de las dos tías, tía Abby, interpretada por la siempre maravillosa Josephine Hull (que por cierto habla un inglés excelente, junto con tía Martha). Las mejores frases de las tías las dice siempre Josephine Hull. Está maravillosa en la película. Me viene a la memoria el momento en que Cary Grant las está riñendo (como a dos niñas pequeñas y traviesas) por asesinar viejecitos y diciéndoles que eso no se puede hacer, que está mal, que va contra la ley, que nadie lo entendería, que no quiere que les ocurra nada malo a ellas porque son sus tías. Y habla Josephine Hull y le pregunta, toda candidez ella: "Pero Mortimer, ¿qué de malo podría ocurrirnos?". Jajajajajajajajaja.
O cuando después de reñirlas por los crímenes que están cometiendo, les pide que no hagan absolutamente nada durante su ausencia temporal mientras va a por la firma del juez. Y sale Josephine Hull y le dice: "¿Pero cuando vuelvas podremos enterrar al señor Hoskins (el último al que se han cargado) y hacerle el funeral? Podrás unirte con nosotras en los himnos religiosos". Total, que toda la regañina no ha servido de nada. Absolutamente de nada. Por un oído les ha entrado y por el otro les ha salido. Jajajajajajaajaja.
O cuando después de la regañina, hablan las dos tías y Josephine Hull le dice a la otra: "Creo que ya sé por qué Mortimer está tan raro hoy. Debe de ser porque se ha casado. Y eso a los hombres les pone nerviosos". Jajajajajajajajajaja.
O cuando le está diciendo al teniente de policía que hay 13 cadáveres en el sótano pero que uno debe irse (el Sr. Spinalzo) porque no pertenece a esa casa. Jajajajajaja. Desde luego, el guión está trufado de frases desternillantes de este estilo. Casi todas de Josephine Hull.
 
La película está rodada prácticamente en su totalidad en un escenario, la casa de las tías, como una obra de teatro. Esto es debido a que creo que está basada en una. El número de personajes es menos de 20 seguro. Y esto demuestra que con pocas cosas y poca gente, en los años 30 Frank Capra hacía auténticas maravillas. Ésta es una de esas. Se intentó conseguir a Boris Karloff para el papel de Jonathan Brewster (el que se parece a Boris Karloff) y hacer que Boris Karloff se parodiara a sí mismo, pero no se consiguió al actor.
 
Y poco más me queda por añadir de esta película, excepto que es realmente divertida y que merece mucho la pena verla. No la recomiendo en versión original (a pesar de que muchos actores hablan un inglés excelente e inteligible) porque es tan disparatada que en algunos momentos hablan tan rápido (sobre todo Cary Grant y los policías) que es complicado entenderlo todo a no ser que lo tengas subtitulado en castellano o en inglés. Espero que todos aquellos que lean este comentario sobre la película, se animen a verla. Ya les digo que merece realmente la pena.
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3 respuestas a Las películas de mi vida (XXI): Arsénico por Compasión

  1. La Señorita dijo:

    Resulta reconfortante saber que existen familias más extrañas que la de una misma, aunque sea en la mente de un guionista. Como la pelicula no la he visto y la mitad de gente no sabia quienes eran, he hecho un ajercicio de imaginación  les he puesto caras de políticos y la fauna que los rodea. Toda la historia empieza cuando Alvarez Cascos se casa con su ex esposa, Gema Ruiz… Caballero, un gran abrazo!

  2. Ignacio dijo:

    Estimada señorita Romero:No olvide nunca que la realidad supera siempre a la ficción.

  3. julia tuliette dijo:

    pues Cary Grant que era un galán empezó a ser grande con Howard Hawks y Frank Capra, luego vendría Hitchcock que se dijo a sí mismo (eso es lo que quiero, ese galán, ambiguo, que tan bien podría ser cómico como dramático, esa percepción ambigua le fascinó en cary grant)
    Capra es todo un mundo, el mundo de la entrañable fantasía de un mundo idealizado, sociedad incluida, con mensaje claro, es simplemente Capra. saludos 

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